El Athletic Rompeolas da la sorpresa y frena al líder en El Picarral

Las Cañas                     1  José Carlos; Gan (Lerín, 50), Luis Cimorra, Brizuela; Blázquez, Puyuelo (Sánchez, 40), Saúl, Peláez, Marcos, Iván, Andrés.

Athletic Rompeolas 1  Javi (Dani, 61); Horcajo, Alberto, Julio, Kike; Jordi, Ernesto (Ángel, 70), Coke, Joaquín, Mario (Quique, 50); Adrián.

Goles: 0-1, min. 28: Adrián, de golpe franco. 1-1, min. 37: Andrés.

Árbitro: Adiego Andrés. No mostró ninguna cartulina en un partido de guante blanco.

Incidencias: Partido de la vigésimo primera jornada de Segunda Preferente Laboral. El Rompeolas lució su uniforme de respeto (camiseta naranja, pantalón y medias de color negro por coincidencia con el equipaje del conjunto local).

      CMF EL PICARRAL. Punto importantísimo el arrancado por el Athletic Rompeolas en el feudo del Las Cañas (1-1) que lo mantiene por segunda semana consecutiva fuera de los puestos de descenso a falta ya de solo cuatro jornadas para el final de la competición.

      La visita al campo del líder se antojaba –con diferencia– el escollo más complicado de lo que resta de temporada. En primer lugar, por la notable trayectoria del Las Cañas, gran favorito para llevarse el título tras el bajón del Bar Estudiantil. Los locales habían encadenado en su feudo seis triunfos consecutivos (su último tropiezo en El Picarral ocurrió en octubre de 2014, derrota 0-1 frente al Fleta Laboral). Y en segundo lugar, por las numerosas bajas a las que tenían que hacer frente El Rompeolas. Las ausencias de José Antonio, sancionado, y Arrébola, en el eje de la zaga, de Pablo y Raúl, en el timón, y Dani, en la punta, seccionaban la columna vertebral de equipo que había crecido a partir de la fortaleza de sus pasillos centrales.

      Con ese panorama, el Rompeolas salió en un primer momento a contener el juego del Las Cañas, con un centro del campo reforzado por la presencia de Coke junto a Jordi y Ernesto, además del trabajo de Joaquín y Mario en las alas. La defensa se organizó con Horcajo y Kike por las bandas, Alberto vigilando de cerca en todo momento al delantero centro Andrés y Julio siempre como libre. Arriba, solo contra el mundo, un renqueante Adrián. La apuesta conservadora funcionó bien en los primeros minutos. Los locales, que también afrontaban el choque con varias bajas en sus filas, dominaban pero se mostraban todavía poco intensos en el juego e algo imprecisos en los envíos. En cambio, el Rompe, cuando recuperaba la pelota, era capaz de conservarla y moverla con criterio en el triángulo formado por Ernesto, Coke y Jordi. El único desajuste lo provocaba la presencia incordiante de Iván en la media punta. El menudo atacante de Las Cañas recibía siempre solo y creaba superioridad entre la defensa y los medios centros del equipo naranja. Una situación que no varió en todo el encuentro y que quizá no fue suficientemente aprovechada por los locales.

     En una de las escasas salidas de la cueva de los visitantes, Adrián se escapó del marcaje de los dos centrales y el portero José Carlos, tras una valiente salida, tuvo que hacerle falta en zona de tres cuartos. Esa acción y un par de buenas aperturas a las bandas para Mario y Joaquín fueron el aperitivo antes de la jugada estelar de la perla leonesa del Rompeolas. Adrián, en el pico izquierdo del área rival, bajó al suelo un balón aéreo con el exterior de su bota izquierda. En paralelo a la frontal del área, se fue de dos defensas hasta que el árbitro señaló falta. El colegiado pudo conceder la ley de la ventaja puesto que, cuando pitó, el delantero del Rompe ya estaba armando su zurda dentro del área para fusilar al portero, pero la sanción también tuvo premio. El artista del guante en la siniestra acarició el esférico y lo puso en la escuadra izquierda, una trayectoria a la que no pudo responder a tiempo bajo los palos José Carlos, (0-1).

      El gol encajado despertó definitivamente a los locales, que en la primera acción posterior bailaron el sistema de contención de su oponente. En varias llegadas consecutivas, mostraron velocidad, buenos movimientos y combinaciones a pocos toques, aunque echaban a perder sus ofensivas por la excesiva fuerza en el último pase. Parecía como si no tuvieran cogida la medida a su propio campo. En otra ocasión al borde del área, Iván pecó de individualista y no encontró momento de pasar la pelota a otro compañero en posición franca. Pero al borde del descanso sí acertaron de pleno. Tras una internada por la banda izquierda con movimiento de arrastre incluido del punta Andrés hacia esa zona, un cambio de juego hacia la parte derecha sorprendió a Kike –durante todo el encuentro con problemas de estabilidad en los balones a su espalda–. El defesa del Rompeolas no acertó a despejar y Marcos se apoderó del balón dentro del área frente a la oposición de Julio, Kike y Alberto. Pudo chutar a puerta, pero la indefinición de este último, que ni tapó completamente su ángulo de disparo ni cerró la opción de pase a Andrés, le permitió decidirse por la asistencia al ariete del Las Cañas, que batió por bajo a Javi, (1-1).

      Preparado para sufrir un aluvión de embestidas en el segundo tiempo, el Rompeolas se pertrechó en su campo pero sin acogotarse en su área. Muy juntitos, achicando balones y currando todos en defensa, los de Jesús –al mando esta vez en el área técnica– sobrevivieron como pudieron y nunca llegaron a hacer aguas. En cualquier caso, solo fueron capaces de pisar el área rival en contadas ocasiones, como en una rápida incursión de Mario por la derecha que finalizó con su clásico recorte rompe cinturas, pero su posterior chut con su pierna izquierda, muy flojo, se marchó fuera. El Las Cañas, en cambio, contó con varias oportunidades de gol. La más clara, un disparo desde la frontal que se estrelló en el palo izquierdo de Dani, que había sustituido a Javi por lesión. En una acción inexplicable, a Dani se le escapó el esférico varios metros hacia un lateral del área (quizá cuando sobre la misma raya de gol se disponía a sacar con la mano) y el terror se apoderó nuevamente de la zaga del Rompeolas. En la siguiente jugada, el recambio en el arco del Rompeolas (que volvió a resentirse de su latosa dolencia muscular), se resarció volando junto al mismo palo izquierdo para despejar in extremis un balón que ya se colaba dentro.

       La torpeza en la gestión de los balones aéreos complicó la vida a los visitantes, castigados continuamente con faltas muy peligrosas cerca del área por saltar apoyándose con las manos en los rivales. Quique y Ángel dieron el relevo a Mario y Ernesto, respectivamente, y echaron una mano en la tarea de defender el empate. Especialmente el primero, que fue capaz de progresar en varias ocasiones por la banda derecha y forzar varias faltas. En la última acción del partido, ya en tiempo de descuento, Coke trató de sacar la pelota y fue embestido por un adversario –muy posiblemente en falta-, pero el árbitro dejó seguir la jugada y un atacante de Las Cañas, en posición protestada por los visitantes, se quedó solo delante de Dani. Con todo a favor, envió la pelota demasiado alto.

       Su impericia resultó providencial para conservar un punto que, a la vista del resto de resultados, y a falta de la resolución del recurso anunciado por el Café Olé Fútbol, deja al Athletic Rompeolas en la décima posición, en un triple empate a 23 puntos con el Veteranos Garrapinillos –que tiene un partido menos, el que disputa este próximo jueves 5 de marzo frente al Atlético Batán, segundo clasificado–, y el Artideco, ya en puesto de descenso. De paso, el empate da algo de vida a la lucha por el título liguero. Las Cañas, también con un partido menos (a disputar frente al colista Usón), cuenta con cinco puntos de ventaja sobre el Atlético Batán y seis sobre el Fleta Laboral, que volvió a pinchar en su feudo (1-1 con el Huérmeda).   Solo quedan cuatro jornadas…